Más allá de esta luna oscura,
no hay más que un cielo oscuro también.
La densa niebla he vuelto a ver,
pensé que ya no estaba ahí,
o tan solo dejé de prestarle atención.
Una lágrima ha hecho eco en mi corazón nuevamente,
la profunda desolación del alma.
La falsa sonrisa del títere que cuelga bajo el sol.
Es una línea dibujada en su rostro,
para crear esa falsa ilusión.
Un sueño ha vuelto a hacer sucumbir mi mente.
El deseo de sangre,
que quizás siempre esté al acecho.
Sangre de su suave cuello,
el cual deseo devorar.
En medio de los árboles hemos caminado hacia su lecho.
Debajo de la oscura luna, caminamos.
Sin sujetarnos, sin mirarnos.
No existe amor, solo deseo incontenible.
Amargo corazón es nuestra semejanza.
Descendiendo por sus cabellos, por su rostro.
Oh si pudiera ese rojo de tus labios poseer,
ese rojo de tu sangre beber,
ese vacío latido siempre escuchar.
Éxtasis es el no sentir, el no querer,
el no mirar, el no reír.
Frío al corazón...
Más allá de esta luna, más allá de ella,
en una estrella danza una mofa.
Prolongada y aguda es.
Su cuerpo y el mío su burla son al desnudos estar.
Titiritero, titiritero.
Mira hacia allá, más allá de esta luna oscura.
Titiritero, allá se esconde.
La nostalgia ha vuelto a ser rocío en nuestros ojos,
humedad en nuestro pecho,
pena en nuestro andar.
Sin sentir, sin sentir sigue mi interior,
nuevamente, solo deseo arrancar su piel.
Más allá de esta luna oscura,
los recuerdos carcomen de nuevo.
Oh luz opaca, qué nos has hecho?
